Alejándose de la urbe unos pocos kilómetros, en Puerto Esperanza se puede visitar una Granja Educativa que permite contactarse con la naturaleza; alimentar los animales; dar paseos a caballo; deleitarse con las recetas caseras, que incluyen dulces, licores y comidas típicas; disfrutando de la tranquilidad que regala este ambiente y la cordialidad de sus dueños.



Rodeada por varios arroyos y el imponente Río Paraná, esta localidad atrae a los amantes de la pesca que persiguen al dorado como premio de su apacible actividad. Además se puede disfrutar de los Balnearios que se emplazan en sus costas y brindan todos los servicios para disfrutar de un día de verano.

El paisaje que conforman los serpenteantes cursos de agua se matiza con extensos territorios dedicados a la actividad forestal, que es la principal en la zona y desplazó al tradicional cultivo de la yerba mate. El Parque Provincial Esperanza es el único lugar de la región que posibilita admirar la naturaleza en estado puro, el resto sufrió la modificación de la mano del hombre. Imperdible su visita.